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viernes, 6 de abril de 2007

Las alucinaciones de un Quijote Moderno

Las alucinaciones de un Quijote Moderno

Resulta incomprensible que un mercader como lo es Luís Martínez Wolf destile tanto veneno o ponzoña. Bien ha de saber que las puertas del Colegio de Marinos y de la Orden de Capitanes y Pilotos están cerradas para esa persona. Claro ha recibido privilegios inmerecidos por parte de las autoridades a quienes les es servilmente incondicional.

Luís Martínez Wolf se dedica a golpetear a un grupo de ciudadanos quienes se han unificado para la defensa del empleo de los marinos mercantes mexicanos, de sus derechos laborales, además del respeto de los derechos humanos que tienen los ciudadanos de este país y del mundo entero.

Critica el Quijote Moderno que los integrantes del Frente Unido de Marinos Mercantes (FUMMAC) participen como actores en la política nacional. Claro está, fue un hecho lamentablemente no haberlo hecho como ahora, haciendo alianzas con ciudadanos que desean que el país cambie. De haberlo hecho con anterioridad la situación de la marina mercante no estuviera muerta como lo está ahora, no por no haber participado, si no por no haber sido escuchados.

Estamos convencidos que el Sr. Benito Baena es un hombre cabal y honesto, quien además de ser el líder de los tranviarios como ese nefasto y triste personaje lo dice, es el Sr. Baena Coordinador de México de la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte (ITF), y una de sus funciones principales es apoyar las causas justas de los trabajadores del trasporte, como todos sabemos ITF agrupa Marinos, Portuarios, Aviación Civil, Ferrocarriles, Transporte Terrestre, Pescadores y Empleados de Agencias Turísticas. El número de afiliados de (ITF) suman 5.2 millones de trabajadores.

La ITF ha llevado acciones poderosas en la defensa de la gente de mar, especialmente de aquellos marinos que han tenido la mala suerte de embarcarse en los buques con bandera de conveniencia. En donde no se respeta la seguridad ni los derechos laborales de la gente de mar.

Nadie ha llorado como lo dice el nefasto escritor de Barloventeando, la postura de los miembros de FUMMAC ha sido valiente, y dicho Frente está registrado notarialmente en las Oficinas de Relaciones Exteriores. El triste célebre personaje que escribe a los marinos para desorientarlos, pelea con las aspas de los molinos viejos.


México tiene graves problemas, no solamente los tienen los marinos quienes están desempleados, también los tiene el campo, ya que no ha recibido apoyo durante 20 años, las importaciones de millones de toneladas de maíz, se hacen totalmente en buques extranjeros. Nuestro Quijote que Barloventea no se ha dado cuenta que las vocaciones y las esperanzas de los cadetes de las escuelas náuticas, quienes esperan tripular buques que crucen los océanos, se frustran cuando tienen que tripular pequeñísimas embarcaciones en la Sonda de Campeche, para abastecer las plataformas de explotación del petróleo. No se fija o defiende a las autoridades que otorgan permisos para la navegación a las naves chatarra, que por tener muchos años de servicio no cumplen con las normas mínimas que exige la navegación en las reglas de los tratados internacionales de la Organización Marítima Internacional (OMI)

A Don Quijote Wolf de la Mancha o a quienes le tengan un poco de estima o lástima, les aconsejó que lo lleven a tratamiento profesional, para quitarle su locura. Nos llama mentirosos, y la prensa ha constatado que ningún buque que atraca en Veracruz ondea la bandera nacional.

Nuestras autoridades marítimas han fallado durante más de 20 años, ni siquiera el gobierno del cambio volteo hacia el mar.


Solamente los buenos ciudadanos pueden impulsar y coadyuvar con el actual gobierno, denunciando a los malos servidores, quienes le han fallado a México.

Fui Inspector de Buques de Bandera de Conveniencia nombrado por la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF) durante 16 años, razón por la que además de conocer los problemas graves que afectan a los marinos de todo el mundo, puedo y es más debo opinar, no pienso que por estar actualmente pensionado, vea estático que la patria se desangra. Que nos hemos quedado sin Marina Mercante y que si la ciudadanía no participa nos quedaremos sin país. Es tiempo de reflexionar.


Atentamente

Pedro J. Miranda Castillo

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