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viernes, 9 de noviembre de 2007

Capitanía amenaza con limitar el tráfico portuario si no se garantiza el calado

En España si auctua la autoridad marítima, ¿y en México?

Fuente: Faro de Vigo

MONTSE FAJARDO / VILAGARCÍA El capitán del buque "Gulf Mews", que transporta metanol, ha denunciado que el calado del canal de entrada del Puerto de Vilagarcía no se corresponde con los 11 metros que recoge su carta náutica. La acumulación de fango ha subido el volumen 25 centímetros, según explicó el capitán del barco en la queja presentada ante su consignataria, la firma vilagarciana Hermanos García Reboredo.
La empresa denunció el asunto ante Capitanía Marítima que a su vez lo trasladó al centro de control de Salvamento Marítimo Fisterra, con base en Porto do Son y a la Autoridad Portuaria de Vilagarcía, que es la responsable de mantener las condiciones de navegabilidad que establece la documentación náutica.
Preguntado al respecto, el capitán marítimo Martín Rosales explicó que habían remitido un fax a la Autoridad Portuaria instándole a hacer los dragados necesarios para restablecer las condiciones exigidas así como a establecer controles exhaustivos en las obras de relleno del muelle de Ferrazo. Capitanía cree que el origen de la acumulación de fangos está en el movimiento de tierras y en la presión que se está ejerciendo en esa zona y de ahí que exijan que se extremen las precauciones.
Aunque la variación del calado no es demasiado grande y por tanto, no creen que exista grave riesgo de accidente, los técnicos de Capitanía no están dispuestos a asumir el mínimo riesgo, teniendo en cuenta "las excepcionales condiciones relativas al medioambiente marino en la ría de Arousa".
Rosales explica que de no corregirse de inmediato la situación se vería obligado a limitar el tamaño de los buques que atracan en la rada vilagarciana. Así se lo ha indicado al organismo que preside Javier Gago López en el comunicado en el que le pide que, teniendo en cuenta la excepcionalidad de la ría, de ahora en adelante evite cualquier circunstancia que al repercutir negativamente en la seguridad marítima les obligue a limitar la libre navegación y las maniobras de los buques en las entradas y salidas del Puerto.
En ese sentido, le indican que extreme al máximo las condiciones de dragado y relleno con controles exhaustivos de manera que se mantengan continuamente las sondas referidas en las cartas de navegación relativas a la ría de Arousa y concretamente, al Puerto de Vilagarcía.


Obligación legal
Capitanía subraya que, más allá de sus exigencias, el Puerto tiene la obligación legal de garantizar ese mantenimiento.
De hecho, también han informado de la variación de calado al centro zonal de control para que tome las medidas oportunas. El jefe del organismo, Joaquín Maceiras, explicó que alertará del incidente al Instituto Hidrográfico de la Marina, dependiente de la Armada para solicitarle que realice las mediciones oportunas a fin de fijar el calado exacto del canal de entrada al Puerto.
Las cartas náuticas fijan en 11 metros el calado del canal de entrada del Puerto de Vilagarcía. Desde Capitanía explican que los buques dejan además un resguardo del 10% de esa cifra, es decir, de 1 metro y 100 centímetros para evitar cualquier incidente.

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