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Fuente: Nuestromar
La industria naval comienza a agitarse en torno a las órdenes de construcción relacionadas con los campos petroleros pre-sal. El Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), ya contabiliza 24 anuncios de astilleros en el país. Seis empresas golpearon a las puertas del banco de fomento para pedir financiamiento, y ya entregaron las cartas de consulta, que es el primer paso para la obtención de recursos de la institución. Diez proyectos, que reúnen cerca de R$4.600 millones en inversiones, tienen el aval del Fondo de la Marina Mercante (FMM) para salir del papel.
Los mayores proyectos que cuentan con aval del FMM serán erigidos en el Nordeste. El proyecto del Astillero Paraguaçu, de la constructora Odebrecht, prevé inversiones de R$ 1.600 millones, de acuerdo con informaciones publicadas en el Diário Oficial da União (DOU). De acuerdo con lo publicado el 22 de enero, los aportes de Eisa Alagoas, en Pontal do Coruípe, deberían sumar R$ 1.200 millones. El Astillero de Bahia (Ebasa), recibirá R$ 905,7 millones. De acuerdo con el BNDES, se trata de instalaciones preparadas para la producción de naves de gran porte o plataformas de petróleo.
Otros dos astilleros deben ser construidos en el Nordeste: Corema Indústria e Comércio, en el municipio de Simões Filho, en Bahia, y Astillero Promar, en Ceará, que segundo el BNDES, será dedicado a la producción de barcos de apoyo.
Por todo el país
La publicación del DOU incluye también una lista de proyectos localizados en Rio Grande do Sul, São Paulo, Amazonas y Rio de Janeiro. WTorre Engenharia estaría preparando la construcción de la segunda unidad del astillero Rio Grande. Astilleros Wilson Sons tienen, según el DOU, un proyecto de instalación de su tercera unidad en el mismo municipio. La misma empresa también planea, de acuerdo con DOU, construir una segunda unidad del astillero en Guarujá, SP. En Rio de Janeiro, el pequeño astillero São Miguel también tiene apoyo del FMM según la resolución del órgano, así como Hermasa Navegação, en Itacoatiara, Amazonas, volcado a reparaciones.
Las nuevas inversiones deben esparcir la producción naval, hoy concentrada en el Sudeste, por todo el país. Hasta mediados del año pasado, la mitad de la mano de obra activa en la industria estaba localizada en el estado de Rio. “Las inversiones anunciadas para los próximos años apuntan a una mayor desconcentración geográfica de la producción, lo que ciertamente traerá impactos positivos para el país, mas inciertos desde el punto de vista microeconómico”, sostiene el estudio elaborado por la Universidad Federal de Rio de Janeiro (UFRJ) en asociación con Unicamp y el BNDES.
Adaptado al español por NUESTROMAR. Fuente: Portos e Navios
La industria naval comienza a agitarse en torno a las órdenes de construcción relacionadas con los campos petroleros pre-sal. El Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), ya contabiliza 24 anuncios de astilleros en el país. Seis empresas golpearon a las puertas del banco de fomento para pedir financiamiento, y ya entregaron las cartas de consulta, que es el primer paso para la obtención de recursos de la institución. Diez proyectos, que reúnen cerca de R$4.600 millones en inversiones, tienen el aval del Fondo de la Marina Mercante (FMM) para salir del papel.
Los mayores proyectos que cuentan con aval del FMM serán erigidos en el Nordeste. El proyecto del Astillero Paraguaçu, de la constructora Odebrecht, prevé inversiones de R$ 1.600 millones, de acuerdo con informaciones publicadas en el Diário Oficial da União (DOU). De acuerdo con lo publicado el 22 de enero, los aportes de Eisa Alagoas, en Pontal do Coruípe, deberían sumar R$ 1.200 millones. El Astillero de Bahia (Ebasa), recibirá R$ 905,7 millones. De acuerdo con el BNDES, se trata de instalaciones preparadas para la producción de naves de gran porte o plataformas de petróleo.
Otros dos astilleros deben ser construidos en el Nordeste: Corema Indústria e Comércio, en el municipio de Simões Filho, en Bahia, y Astillero Promar, en Ceará, que segundo el BNDES, será dedicado a la producción de barcos de apoyo.
Por todo el país
La publicación del DOU incluye también una lista de proyectos localizados en Rio Grande do Sul, São Paulo, Amazonas y Rio de Janeiro. WTorre Engenharia estaría preparando la construcción de la segunda unidad del astillero Rio Grande. Astilleros Wilson Sons tienen, según el DOU, un proyecto de instalación de su tercera unidad en el mismo municipio. La misma empresa también planea, de acuerdo con DOU, construir una segunda unidad del astillero en Guarujá, SP. En Rio de Janeiro, el pequeño astillero São Miguel también tiene apoyo del FMM según la resolución del órgano, así como Hermasa Navegação, en Itacoatiara, Amazonas, volcado a reparaciones.
Las nuevas inversiones deben esparcir la producción naval, hoy concentrada en el Sudeste, por todo el país. Hasta mediados del año pasado, la mitad de la mano de obra activa en la industria estaba localizada en el estado de Rio. “Las inversiones anunciadas para los próximos años apuntan a una mayor desconcentración geográfica de la producción, lo que ciertamente traerá impactos positivos para el país, mas inciertos desde el punto de vista microeconómico”, sostiene el estudio elaborado por la Universidad Federal de Rio de Janeiro (UFRJ) en asociación con Unicamp y el BNDES.
Adaptado al español por NUESTROMAR. Fuente: Portos e Navios
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